No mires arriba, la película que genera revuelo

No mires arriba es una película original de Netflix, estrenada a finales del 2021. La película cierra con broche de oro este año tan complicado donde una pandemia toca la puerta de todos los habitantes del mundo. Adam MacKay, utiliza una premisa clara: el fin del mundo se acerca por el inminente choque de un cometa contra la tierra. Por eso dos astrónomos, interpretados por Jennifer Lawrence y Leonardo Di Caprio (ni más ni menos), deben dar a conocer el futuro de la humanidad. El problema es un “pero” pues algo que debería ser motivo de alarma mundial resulta ignorado porque no vende y no gana elecciones.

Para Aristóteles la comedia partía de la necesidad de imitar aspectos de la vida de los ciudadanos, precisamente se imita lo desagradable. Esto con el fin de que a través de la risa se dé un mensaje. En No mires arriba toman la anterior premisa como si de un manual se tratase. La película pretende que esta comedia dé cuenta de un gran problema de nuestra vida: los medios de comunicación y la agenda política del gobierno. Muchos críticos ven esto como algo negativo pues se exagera el mensaje y las actuaciones. Lo cierto es que cada personaje y acción en el filme es un concentrado de personalidades reales, se parodian empresarios, políticos y hasta agencias gubernamentales.

Aunque para muchos críticos la manera en que se hace ver el mensaje es absurdamente exagerado, para mí es un grito claro y agudo, pues no tendría que ser menos. En un mundo globalizado donde la verdad la poseen los altos mandos del gobierno, empresarios y medios de comunicación, eventos que perjudican o acaban la vida de miles de personas se relegan a una sección más en las agendas. ¿En qué punto dejé de hablar de la película y empecé a hablar del mundo real? Es esta misma línea delgada, muy delgada, lo que diferencia el mensaje que se da dentro de esta película con el que se pretende dar a las personas reales que consumimos política y medios de entretenimiento.

Si una comedia no da un mensaje, si una película no emociona de muchas maneras, buenas o malas, entonces estamos ante un desperdicio de nuestro tiempo. En No mires arriba seguro vas a encontrar muchas emociones y un extraño sentido de incomodidad al pensar en el mensaje que dan. Es un filme en el cual no vas a perder el tiempo, la vas a disfrutar a cada segundo. En No mires arriba hay de todo: actuaciones excelentes, un gran casting, momentos épicos, momentos graciosos y lo mejor: un mensaje.
No mires arriba es lo que llamo una cachetada con guante blanco, usa un medio de entretenimiento para criticar agudamente al entretenimiento, usa la ficción para juzgar la realidad y sobre todo, usa la risa para dar cuenta de lo que no deberíamos reír en la vida cotidiana. No mires arriba, pero sí esta película.