El esperado final de la saga Jurassic World, la segunda fase de la franquicia que inició hace treinta años con Jurassic Park llega a México.

Este 1 de Junio vimos la épica conclusión de Jurassic World que Universal Studios ha prometido desde hace cuatro años, cuando Fallen Kingdom, la segunda película de la saga, llegaba a los cines. Ahora los dinosaurios regresan, y el reparto no podría ser más satisfactorio. A lo largo de los últimos años, sin embargo, obtuvimos spots de la película, como el short Battle at Big Rock o El Prólogo, lanzado el año pasado.

La moral de la historia

A lo largo de esta franquicia nos hemos topado multiples veces con el dilema de «jugar a ser Dios», y esta cinta no es la excepción, realmente toca cuestionarse sobre la avaricia y estupidez humana, ambos infinitos según algunas opiniones, y es que en cada película de la franquicia hay un antagonista decidido a usar a las criaturas prehistóricas para hacer dinero; aunque el de esta entrega no parece tan tonto, en realidad.

El Dr. Ian Malcom continúa estudiando el caos, algo que se vuelve bastante útil en esta era de convivencia entre criaturas separadas por millones de años. Recordemos cuan decididamente ha dado su opinión desde la primera película, y eso continúa sin cambiar.

Regresan viejos amigos

Algo que sin duda fue parte de la atracción de esta película fue el regreso de los protagonistas originales de la franquicia: Alan Grant (Sam Neil), Ellie Sattler (Laura Dern) e Ian Malcom (Jeff Goldblum). Y me da gusto decir que retoman sus papeles como si hubieran pasado un par de meses y no varias décadas desde que los vimos por última vez. Nos dan ciertas pistas de lo que han estado haciendo, porque claro, todos nos preguntábamos cómo podrían quedarse al margen de los eventos. Lo cierto es que cada uno, en su campo, hace lo que puede, no podíamos esperar que corrieran hacia el peligro a enfrentarse con dinosaurios como lo han hecho Chris Pratt y Bryce Dallas Howard en las últimas tres entregas.

No obstante, no son los únicos que realizan su regreso. Algunos viejos amigos vuelven en papeles menores, solo para despedirse de sus roles tal vez, pero resulta suficiente si eres de las personas a las que siempre les agrada ver un rostro conocido en la adversidad.

Con este gran cast, lleno de premios y nominaciones, con largas carreras, Bryce Dallas Howard se destaca con una actuación brillante, retomando las características fuertes de Claire y un lado un poco más sensible pero que aporta dinamismo a su personaje.

Jurassic World y su «épica conclusión»

La verdad es que no se siente del todo como una conclusión, es una digna película de Jurassic sin embargo. Desde el primer momento estamos atentos a cada movimiento en la trama, puesto que a pesar de todos los trailers no sabemos realmente qué esperar.

Es gratificante que la película en ningún momento se vuelve lenta, conserva su paso firme contando dos historias separadas que cruzan caminos a cada rato, pero sin volverse tedioso. Nos da las secuencias de acción que caracterizan a la franquicia, las cuestiones filosóficas, charlas científicas y, claro, un pequeño romance en el fondo que no roba la atención de la preocuación principal. A pesar de esto, la película no se vuelve frenética, así que realmente está equilibrada, aunque un poco floja en ciertos diálogos en los que tratan de relacionar ambas generaciones de la franquicia.

Tiene muchos puntos buenos, caminos inteligentes, y los personajes no terminan cometiendo tantos absurdos como esperar a que los raptores se comuniquen con el Indominus. Pero, hacen mucho uso de su movimiento especial para controlar dinosaurios, es decir, funciona con los raptores porque fueron criados así, pero, ¿lo usas contra los depredadores alfa?

Varias cosas resultan muy convenientes, pero después de todo, de eso se tratan las películas. Honestamente no creo que podamos pedir realismo para las situaciones humanas en una película donde hay una reserva para dinosaurios en Italia.

Mejoría en los efectos visuales

En cuanto a los efectos especiales resulta haber mejoría, pero para ser honesta, el diseño de Blue no parece tener mejor calidad que la de la película anterior. No obstante, el uso de animatronicos es claro y satisfactorio. La película apuesta más por una trama ágil que por un sin fin de CGI, lo cual se agradece. Y, hay que mencionar que el director de fotografía John Schwartzman merece un gran reconocimiento por las increíbles vistas de esta entrega.

La cinta trata de reencontrarse con el valor sentimental de las primeras entregas; logra un comparativo con «The lost world», donde los dinosaurios no son los villanos (y los potagonistas no están huyendo frenéticamente de ellos), sino la avaricia.

Con un presupuesto de USD$ 165 000 000, creo que Dominion hizo valer cada centavo.

Esperen, próximamente, la reseña con spoilers y un poco más de sentimentalismo.